El Ayuntamiento espera llegar a los 600 en el mes de febrero –

El Ayuntamiento continúa realizando plantaciones de árboles en todos los puntos en los que pasó el temporal Bernard dejando tras de sí, un importante número de árboles caídos, además de otros muchos en muy malas condiciones estructurales, que han debido ser retirados para evitar accidentes posteriores y porque los daños que les ocasionó la tormenta no permitían la viabilidad del propio árbol.

La primera fase de la replantación se dio por finalizada el 31 de diciembre, habiéndose plantado hasta ese momento un total de 229 árboles que se han repartido entre los parques, calles y plazas del municipio y pedanías.

Se han plantado 18 especies diferentes de los siguientes ejemplares: Laurel, 15; Júpiter, 6; Árbol del Amor, 9; Morera, 17; Acacia, 2; Tipuanas, 15; Encina, 33; Fresno, 21; Madroño, 16; Almez, 20; Altea, 7; Plátano de Sombra, 14; Naranjo, 17; Olmo, 8; Tilo, 7; Roble, 1; Algarrobo, 16 y Acacia, 5.

Las zonas en las que se han  realizado las plantaciones son: Parque de Consolación, Paseo de Consolación, Urbanización San Sebastián, Plaza de Francia, Avd. de Portugal, Plaza de Ronda Huerta Nueva, explanada frente a la Ermita de Consolación, Plaza Pablo Iglesia, Zona verde de la avenida de Constelación Corona Austral, Plaza Montes de Oca, Parque Adolfo Suárez (Junto a granja Santa Matilde), La Corredera, Parque V Centenario y Guadalema de los Quintero.

El concejal de Parques y Jardines, José A. López León, señala que la segunda fase de la plantación se ha iniciado ya en el parque del V Centenario y que, “hay que tener en cuenta que muchas de las zonas antes mencionadas volverán a ser replantadas, por lo que en total se prevé plantar alrededor de 300 nuevos árboles y llegar en torno a 600 a mediados de febrero”.

Según se refleja en el informe técnico, los criterios que se han tenido en cuenta a la hora de elegir las ubicaciones de plantación y las especies empleadas, están condicionados por el hecho de que ésta no es una plantación al uso, sino una tarea compleja en que se requiere tener en cuenta contribuir a la armonía de la arboleda del entorno, el grado de sombra que estos proyectan con el fin de que los nuevos árboles a reponer no sufran una excesiva elongación de su porte (fuente de numerosos problemas de estructura) y un análisis de las dimensiones adultas para que no produzcan problemas de conflictos de espacios en el futuro.