El alcalde, Francisco Jiménez, y la delegada de Vivienda, Isabel González, se han reunido con los vecinos de las 40 viviendas sociales que el Ayuntamiento de Utrera construyó en régimen de alquiler en la calle Antonio de Nebrija, a través de la sociedad municipal ya desaparecida, ante la incertidumbre de los inquilinos por la situación de estos inmuebles que en la actualidad pertenecen a La Caixa.

Jiménez ha tranquilizado a los residentes y les ha asegurado que “ninguna de las personas que esté cumpliendo con el pago del alquiler va a salir de estos pisos, porque si se cumplen las condiciones del contrato, nadie puede echaros de donde estáis viviendo”.

El primer edil asegura que la intención del consistorio utrerano es la adquisición de los 40 pisos, “pero no a cualquier precio”, por eso no se ha llevado a cabo hasta el momento. Por su parte, los vecinos denuncian las cartas y llamadas “amenazantes” que algunos de ellos está recibiendo en el intento de que abandonen las viviendas, según afirman los inquilinos. A esto hay que unir, que la empresa propietaria no se está haciendo cargo del cobro de los alquileres, lo que suscita especial inquietud entre los residentes, que temen que se les acuse del impago de las viviendas.

Así las cosas, el alcalde informó a los vecinos de la contratación de un bufete de abogados para ocuparse de este tipo de cuestiones y, en el transcurso de la reunión, los vecinos acordaron qué personas van a ser las que les representasen y sean las que mantengan el contacto directo con el Ayuntamiento de Utrera para conocer en todo momento cómo se va desarrollando el proceso.

El primer asunto será ver de qué manera se puede gestionar el pago de los alquileres, ya que La Caixa se ha desentendido y no está pasando los recibos al cobro. “Se verá con los abogados de que manera proceder a ese pago para que llegado el momento ningún vecino pueda llevarse una sorpresa, o se encuentre con una cantidad de pagos atrasados a la que le cueste poder hacer frente”, ha señalado Jiménez.

El alcalde ha recordado que estas personas tienen contratos vigentes desde 2007 y 2008 y “nadie va a echarlos de sus viviendas, porque desde el Ayuntamiento no lo vamos a permitir y, además estamos hablando de familias con pocos recursos y, por lo tanto, en situación de vulnerabilidad”.

Francisco Jiménez señala que se van a seguir manteniendo los contactos con La Caixa para resolver de una vez por todas esta situación. En este sentido, ha recordado que el anterior gobierno llegó a consignar una partida en el Presupuesto Municipal de 2016, de más de dos millones de euros, un préstamo que finalmente no se llegó a ejecutar para destinarlo a la compra de estas mismas viviendas y la de Movimiento Maqui, adquiridas con posterioridad en 2021.

El alcalde ha asegurado que, dentro de la política de viviendas que se ha planteado el gobierno PP-Utrera+, del mismo modo que se contempla la construcción de viviendas nuevas en régimen de alquiler a precios asequibles, como las 38 viviendas que se construirán en Los Ruedos y cuyas obras se prevé que comiencen antes de final de este año, también se han adquirido otros inmuebles “y vamos a continuar trabajando para devolver al Ayuntamiento la propiedad de las 40 viviendas sociales de Antonio de Nebrija, para que los inquilinos que están cumpliendo con sus contratos puedan estar tranquilos y podamos ocuparnos desde el consistorio de la gestión de estas viviendas que volverán a ser de titularidad pública”.