La nueva ordenanza será aprobada en el Pleno Ordinario que tendrá lugar mañana 12 de abril.

El mercadillo y la venta ambulante se adapta de esta forma a la normativa autonómica que data del pasado año 2012, habiéndose modificado un año después.

La nueva Ordenanza sustituye a la anterior, que estaba desfasada y no cumple con la legislación vigente. Como consecuencia de la alegalidad en la que se encontraba regulada la venta ambulante en nuestra localidad, los últimos años se detectaron múltiples irregularidades en la concesión de los puestos ambulantes.

La delegada del ramo, María José Ruiz, ha declarado que esta Ordenanza “recoge los principios básicos de imparcialidad y transparencia y publicidad a los que debemos acogernos todas las administraciones. Además, hemos querido que tuviera una clara connotación social con la elaboración de varios puntos que favorecen a los usuarios de Servicios Sociales”.

La Delegación de Políticas Sociales e Igualdad ha trabajado arduamente en la elaboración de esta nueva Ordenanza con el objetivo de regularizar la situación del mercadillo. Entre otras cosas, recoge: “Cada puesto deberá estar dotado por el titular de un recipiente donde se depositen los residuos, embalajes y basuras que puedan producirse, prohibiéndose terminantemente el depositarlos fuera de los mismos”.

Por otra parte, y de acuerdo con lo establecido en la legislación vigente, la Ordenanza contempla la concesión de autorizaciones para los puestos del mercadillo para un período de 15 años, si bien también contempla: “Con independencia del plazo máximo establecido para la autorización, los titulares estarán obligados anualmente a presentar una declaración responsable del cumplimiento de los requisitos necesarios para la obtención de autorización. Asimismo, anualmente los titulares deberán acreditar que se encuentran al corriente en el pago de las tasas municipales, en las obligaciones tributarias y de alta en la seguridad social”.

Una importante novedad en esta Ordenanza y que recoge el espíritu social es que los puestos vacantes derivados de renuncias a lo largo del año natural, podrán ser adjudicados de forma provisional entre los usuarios de los Servicios Sociales Comunitarios de Utrera.

También, en cuanto a los criterios para la concesión de las autorizaciones del mercadillo, la Ordenanza presta especial atención a “la consideración de factores de política social como la dificultad para el acceso al mercado laboral de los solicitantes o el número de personas dependientes económicamente a cargo de los solicitantes”.

Esta Ordenanza constituye una herramienta de mejora del comercio ambulante en Utrera; en este sentido nos va a proporcionar mecanismos que nos permitan adoptar las medidas adecuadas en aquellos casos en los que se generen problemas (venta ilegal, suciedad, etc.).

En definitiva, mediante esta nueva Ordenanza la Delegación de Políticas Sociales pretende seguir trabajando en la línea marcada, que no es otra que garantizar el derecho de los comerciantes a ejercer su actividad en las mejores condiciones, al mismo tiempo que garantizar el cumplimiento de la normativa vigente y de los derechos de los consumidores y usuarios.